Solo algunas nubes cubrían el cielo, retazos de lo que había sido una noche tormentosa, en donde a pesar de la densa lluvia y el aplastante clima una extraña alegría se había cernido sobre mi alma. Horas intentado encontrar sentido a esa extraña sensación de estar completo entre tanto vació, estar completo de un vació que lo llenaba todo en mí. Algo debía de faltar, mil veces pregunte lo mismo, pero seguía sintiendo de la misma manera.
Pocas razones encontré, pero tenía fuertes razones para aceptar que de una vez por todas que la vida me había regalado ese pequeño momento de serenidad interior para lograr comprender que todo podía mejorar, que todo podía cambiar y de a poco, quizás muy lentamente lo estaba logrando.
Dejando atrás el pasado y sin mirar al futuro pues sobre el se extiende la niebla mas densa que podamos imaginar, enfocando mi mente en el presente, intentado hacer eso que muchos llaman vivir el momento.
Faltó de experiencia en muchas cosas, sin vivencias que relatar, me doy cuenta ahora que nada importante me sucede, que no hay nada que decir y que ese vació era lo que me llevaba a contar historias de pena y desilusión, en las que mil muertes me abrazan y dejan cenizas en mi, marcas de lo que podría ser y pudo haber sido muchas veces.
Seria hablar sin pensarlo si les dijera que de una vez por todas encontré mi equilibrio, pues a pesar de este sereno sentimiento se que aun queda mucho por ordenar, muchas piezas que unir y otras tantas por encontrar, más estoy seguro de que hoy mas que nunca puedo ver en mi mismo eso que no lograba comprender.
¿Qué tenia que pasar?
No lo se, pero creó haber encontrado algo que sirvió para ver que mi forma de pensar debía cambiar. Cuando encontré a alguien que pensaba de la misma manera que yo lo hago, que tenía interrogantes que yo no podía responder, que me ayudo a aconsejarme a mí al darle mis consejos.
Siempre los dí, lo se, pero nunca supe tomarlos para m6iacute y estoy convencido ahora mas que nunca que todos tenemos la respuesta dentro de nosotros, pero la gran pregunta es como descubrirla.
No tengo réplica a esta pregunta, yo creo haberlo logrado, pero no siempre los mismos métodos funcionan en las mismas situaciones. La respuesta en mi caso fue encontrar mi propio reflejo, alguien a quien a pesar de no pasar por las mismas dificultades supe dar los consejos que yo debía tomar.
Los cuales siempre tuve en cuenta aunque como a muchos nos sucede, nunca los apliqué, no creo necesario detallarlos en este momento, pues no tienen relevancia en lo que aquí estoy tratando de enunciar.
Aun no se como es que tardé tanto en darme cuenta de esto, pues cientos de veces dí consejo a personas mas próximas y siempre cometí el error de no tenerlos en cuenta.
Una vez mas convierto este medio en una forma de sacar conclusiones apresuradas de mi mente, que luchan por ganar un lugar en el papel y que fluyen por mis manos en enigmáticas frases, sin mucha idea de poder descifrarlas, pero escritas desde lo profundo, dictadas por mi mente y mi corazón, que no siempre están de acuerdo.
Pues el corazón es muy impulsivo y la mente racional, teniendo siempre en cuenta que de sentimientos hablo al referirme al corazón, el cual desde hace siglos ha sido estandarte y símbolo de sentimientos y sinrazones. Encontrar el balance entre los dos es una misión riesgosa en la cual llegue a perder la razón más de una vez, una tarea que me llevo a rincones oscuros a los que no me gustaría volver. Una vez me dijeron que para alcanzar la luz hay que haber llegado al mas profundo y oscuro foso, para poder llegar alto se debía sufrir y perder muchas cosas, para que al lograrlo, al tocar los cielos, nos demos cuenta realmente de que tan difícil fue llegar allí y así valorar nuestros esfuerzos y nuestras recompensas. Se que aun queda mucho en mi camino, muchas piedras con las que tropezar y muchos fosos de los cuales escapar, pero ahora es diferente. Renovadas las energías el camino es mas ligero, intentare admirar el paisaje que rodea mi cuerpo y mi mente y vivir al máximo esas pequeñas alegrías que la vida nos brinda cuando las necesitamos, porque que es la felicidad sino una conjunción de efímeras alegrías y como explicase algún escritor cuyo nombre se perdió en mi mente, que explicaba que muchos hombres esperan la llegada de la gran felicidad y no se dan cuenta que esta es la conjunción de aquellas pequeñas alegrías que nos da la vida.
Hoy puedo decir que la vida me regalo un pequeña alegría, de la cual intento tomar el mejor provecho, la cual ahora puedo decir me sirvió para renovar fuerzas y darme cuenta de que no todo esta perdido, que simplemente hay que saber mirar mas allá de la niebla que nos rodea he intentar vivir esta vida intensamente sin descuidar esos momentos de serenidad que nos permiten recobrar fuerzas, meditar y darnos cuenta de que no debemos perder la esperanza, porque todo llega en esta vida, solo hay que saber esperarlo y aprender que cuando llega, hay que saber sacar el mejor provecho.
Muchas gracias por todo lo que me han dado ustedes, quienes a pesar del anonimato que vemos en la red, han sabido identificarse en mí así como yo lo hago en ustedes. Gracias a todos aquellos que dieron consejo y me acompañaron por mis malos ratos y gracias a aquellos que me acompañaran en las buenas.
Un saludo, Darkness Writer.
P D: por último me gustaría aclarar a ustedes, queridos lectores, que seguir6eacute siendo el mismo que un tiempo atrás escribía a la muerte, pues soy una persona que respeta a la oscuridad ya que ella fue y será mi gran amiga (al menos en estos momentos) y ahora me doy cuenta que no es necesario salir de ella para alcanzar la felicidad, porque así como lleno mi corazón de soledad, fue ella quien me ayudo a ver que esta ultima no siempre es mala compañía y que si no fuera por ellas no seria quien soy, gracias.